Ludopatía, cuando el juego se vuelve una enfermedad

Ludopatía, cuando el juego se vuelve una enfermedad

¿Quién no ha probado suerte alguna vez en un juego de azar? Muchas personas suelen jugar todas las semanas o meses, eligiendo los mismos números o repitiendo jugadas por mera cábala.

Sin embargo, cuando la necesidad de jugar altera el comportamiento y se vuelve un impulso que debe ser satisfecho inmediatamente, podemos hablar de un trastorno conocido como ludopatía.

Esta patología va mucho más allá de jugar de vez en cuando y verificar el resultado de las jugadas en sitios como Loterías Mundiales, en donde aparecen los números diarios que resultan de las quinielas locales.

La ludopatía es una enfermedad que puede asemejarse a una adicción a una sustancia química, por la cual la persona que la padece vive, piensa y actúa en función de jugar, colocando en segundo plano sus necesidades y su vida personal, laboral y profesional.

Si bien no se reconocen causas directas que provoquen este trastorno, existen ciertos factores que pueden incidir en su aparición. Predisposición genética al ser hijo de ludópatas, un entorno social que normalice el juego como adicción y/o inestabilidad psíquica y psicología, son algunos de los elementos que podrían influir.

 

Síntomas

Los ludópatas experimentan cambios en sus hábitos y conductas, adoptando comportamientos adictivos y autodestructivos. En primer lugar aparecen problemas económicos relacionados con falta de dinero, solicitación de préstamos o gastos innecesarios e imprevistos. No obstante, a menudo son mentiras para esconder su situación de adicción.

Dado que el juego pasa a ocupar un lugar central dentro de la vida de los ludópatas, ellos se alejan de su entorno laboral, familiar y social. Por otro lado, experimentan cambios en su personalidad. Suelen aflorar emociones negativas como irritabilidad, intolerancia, falta de comunicación y agresividad.

Como consecuencia de las deudas, los engaños y el alejamiento de su ámbito de referencia, los ludópatas pueden padecer ansiedad o depresión. Y, caso se vean imposibilitados de jugar, es normal que sufran síndrome de abstinencia.

 

¿Cómo puede tratarse?

El primer paso consiste en que el ludópata reconozca que tiene un problema y manifieste voluntad de solucionarlo. Una vez que esto ocurre, lo mejor es combinar la terapia farmacológica con la psicológica.

La medicación ayudará a que pueda frenar sus impulsos y regular su conducta, a la vez que la psicología le otorgará las herramientas necesarias para reforzar sus actitudes positivas, dejando de lado las negativas.

Es recomendable  que la persona se apoye en un familiar o amigo para que pueda ejercer un control externo que evite las recaídas.

 

Prevención

Para prevenir la ludopatía, es clave que la persona pueda encontrar el límite entre el juego sano y el patológico.

Jugar de vez en cuando a la lotería, a la quiniela o al Telekino y entrar en el enlace https://www.loteriasmundiales.com.ar/Juegos/telekino para ver los resultados no tiene nada de malo. Pero cuando el juego se torna lo más importante, podemos decir que se está frente a una situación perjudicial.

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